Día 9 – Llegada a Perm, cambio de planes y casi pelea (1.450Km)

Miércoles, 22 de junio. Ya por la mañana, la officer me despierta y me dice, o eso intuyo, que Perm es la siguiente parada, que me prepare para saltar en marcha del tren. Y así es, sobre las 9:30 AM de la mañana, hora Moscú, llego a Perm y siguiendo los consejos de google maps, bendito sea de cuanto me va a salvar, cojo el número 68, evidentemente con las risas de la chica que cobra los billetes; que por cierto el funcionamiento es curioso, está el conductor, y luego hay una persona que trata de moverse por el autobús cobrando a la gente.

Ya en Perm, bajando del tren. 

Estación de Perm II

Bueno, a los 30min llego al hostel, y por lo que veo, por lo menos he recuperado un poco el espíritu de los hostels de Moscú y St. Petersburgo, aunque un poco más pequeño y menos dinámico. Eso sí, al menos la gente del staff sabe hablar inglés, o Natasha que es quien me atiende lo habla correctamente, y por cierto me fijo en la hora en un reloj que tienen en la recepción, las 12AM … mierda he cambiado dos usos horarios respeto a Moscú y no me había enterado, ahora sí he de vivir con dos horarios.

Caminando por las calles de Perm.

Taxis de Barcelona en Perm???

Monumento a los antiguos habitantes de los Urales y el Hotel Ural, el más conocido de Perm 

Después de descansar, ducharme, cargar el móvil y demás cosas, me voy a dar una vuelta por Perm; mi primera idea es ir a la oficina de turismo a preguntar cómo ir a ver el campo de concentración de PERM-36, así que voy chino chano hasta donde se supone que está la oficina de turismo, pero a la que llego allí, uppps …ya no está ahí. Por suerte, también son las noches blancas de Perm, casualmente, y hay varios letreros con un mapa de la ciudad donde hay espectáculos o actividades por las noches blancas y casualmente la oficinia de turismo aparece marcada en un númerito… Salvado!!!!

Así que voy para allá, tranquilamente siguiendo una línea verde que hay pintada en el suelo y que si la sigues supuestamente visitas lo más reseñable de Perm, que bueno, para mi se han  inventado cosas para que parezca que hay mucho, pero en fin, Perm es una ciudad sin más.

Después de dar un par de vueltas, porque para entrar en la oficina de turismo has de entrar por la puerta de atrás del edificio, les pregunto que ver en Perm, sobre las noches blancas y como llegar a Perm-36, a lo que me indunda de papeles y me dice que para llegar a Perm hay que coger un bus que va hasta Chusovoy, decirle al conductor que pare en Kuschino y caminar 2,5 km, más o menos, pero la chica de la oficina cree que lo difícil será volver de allí, porque no hay autobuses que paren allí y tendré que hacer o autostop o caminar 10km hasta Chusovoy y que además el tiempo de viaje son 2horas.

Con lo que ya he descartado ir esa misma tarde, porque no me da tiempo, y mañana tendré que cambiar billetes de tren porque los que tenía reservados no me valdrán o llegaría muy justo, así voy a tener que repensar que voy a hacer.

De vuelta en la calle, decido seguir la línea verde, a ver por donde me lleva, por momentos me siento Dorothy siguiendo el camino de las baldosas verdes y nada me da una vuelta por la ciudad y haciendo paradas en edificios de mercaderes, la antigua estación de tren, el muelle, etc, pero bueno, es más entretenimiento que otra cosa.

Siguiendo el camino de las baldosas verdes como Dorothy en el mago de OZ

Vistas de una de las calles más importantes de Perm

Panorámica del río Kama.

Estatua de Lenin, las ciudades en Rusia se dividen en estatuas a Lenin o monumentos al soldado desconocido

I love Perm, o algo así pone ... =P

Una vez ya se ha acabado la ruta de la línea verde, me voy a ver de dónde salen los autobuses y a preguntar horarios, y más o menos, o lo que entiendo es que salen bastantes seguidos, deben salir cada 20/25 minutos más o menos, con lo que en ese sentido no hace falta que me marque ninguna hora y nada, puesto que ya he visto las ciudad, o sus grandes monumentos y edificios, es hora de la cerveza diaria … XD … así que me meto en una especie de taberna, bar  extraño donde, evidentemente no hay nadie y descanso un rato y reviso los emails y el whastApp, y decido ir mañana a Perm-36 y quedarme esa noche en Perm y salir por la mañana a Ekaterimburg para llegar al día siguiente a Tobolsk, atraso todo un día. Si es cierto, que el bar ya llegando a la noche, se empieza a llenar, que no es un sitio tan turbio como parece.

Más Lenin, la verdad que le tienen devoción en Rúsia 

Filarmónica de Perm tocando en la calle como evento por las noches blancas de Perm

Jóvenes y no tan jóvenes dándose un remojón en el parque de Gorodskaya, hacia calor de verdad

Cervecica para recuperar fuerzas.

Después de la cerveza y ponerme al día, ya va siendo hora de decidir donde cenar, lo que se convertirá casi en un gran problema, la comida. Todo aquí y en las futuras ciudades, está en ruso, nada en inglés, y evidentemente los camareros no saben nada de inglés, con lo que saber que  vas a pedir para comer es un acto de fe, la mitad de los días no sé qué estoy comiendo; así que por esta vez decido ir a comer algo que haya visto y justo en el muelle, al lado del río, han puesto unos tenderetes, chiringuitos, donde hacen carne a la brasa, una especie de pinchos, y además como está anocheciendo creo que será un buen sitio para cenar.

Evidentemente, a la que llego allí y pregunto que es cada cosa, son unas risas; en el chiringuito preparan una especie de pinchos de diferentes tipos de carne, de pollo, de vaca, de cordero, hasta ahí bien, más o menos por el color y la textura de la carne puedo intuir que es cada cosas, ahora el problema viene es que has de pedir cuantos trozos quieres y el precio va según el peso, cosa que no había entendido, con lo que como siempre, se me fue la mano pidiendo  carne, que por cierto estaba rica.

Puesta de sol desde los chiringuitos al lado del río Kama

Ambientazo en los chiringuitos; el DJ arrasaba con la música

Ya de noche, sobre las 11 o 12 de la noche ... para el hostel

A todo esto, y mientras estoy comiendo en la terracita del chiringuito, se acerca un tipo un poco, digamos, pasado de todo, alcohol, yo diría que drogas también y de la mala vida, que me dice algo en ruso, imagino pidiéndome dinero o algo de comida. Como le contesto que no le entiendo, decide sentarse en mi mesa y apoyar la cabeza como si fuera a dormir, y de repente, aparecen 4 tipos más el cocinero con una de las barras que utiliza para asar la carne diciéndole que se vaya y comienza una pequeña trifulca. Al final, después de empujones y de tirarlo al suelo, mientras a mí me llevan a otra mesa, lo echan del chiringuito y uno de ellos comienza como una estúpida pelea con el hombre, uno intentando pegarle patadas y el otro en posición de combate de artes marciales, muy surrealista todo; mientras el resto se está riendo de la escena.

Al final todo acaba en nada y a mí me acaban invitando a otra coca cola. Por momentos me he sentido como un Don con una serie de secuaces como guardaespaldas, ha sido raro.

Ya después de cenar, del sucesos de casi pelea, me voy al hostel, ya toca. Allí, la recepcionista de la noche me pregunta que tal, y le comento que al día siguiente quiero ir a Perm-36 y me presenta a unos chicos irlandeses que han ido por la mañana, que luego, este grupo me iré encontrando en futuras ciudades ya que hacemos un viaje parecido pero me llevan un día de diferencia; y me explican cómo llegar hasta allí, que merece la pena ir, y que volver, a diferencia de la chica de la oficina de turismo, me dicen que es fácil, que hay una parada a 1km más o menos, pero que se pueden parar los autobuses en medio de la carretera sin problemas. Estoy con ellos más o menos durante una hora o así, y se agradece poder tener alguna charla extendida, ya que entre que hay pocos extranjeros y los rusos no hablan inglés, voy a tener que inventarme algún amigo nuevo … =P

Después de un rato ya nos despedimos, ellos se van al día siguiente y yo iré a Perm-36, así que a actualizar el blog y a dormir un rato, mañana a Perm-36, tengo bastantes ganas de ir allí.